lunes, 27 de febrero de 2017

PÉRDIDAS

“…Jehová puede darte mucho más que esto” (2º Cr.25:9)
Tal vez hemos tomado malas decisiones, invertimos mal nuestros recursos, dilapidamos pertenencias.
Y nos sentimos muy mal y muy culpables, porque nuestras acciones también han dañado a otros.
Hoy te doy una buena noticia:
Si buscas a Dios con un corazón lleno de humildad y arrepentimiento, Él te escucha. Te está esperando para restaurar toda situación y recompensarte, no sólo recuperarás lo que has perdido, sino que puede darte mucho más, lo multiplicará.
Cuando el Señor restaura, las cosas no vuelven a su estado primitivo, sino que quedan muchísimo mejor, con excelencia, como todo lo que Él hace.
Amasías era un rey de Judá que contaba con un gran ejército, pero para enfrentar a un enemigo decidió contratar a otros soldados e invirtió mucho dinero en eso.
Dios no aprobaba esta situación, había sido advertido por el profeta. El rey estaba preocupado por su mala inversión, pero el varón de Dios le respondió: “Dios puede darte mucho más que eso”.
El Señor no tiene en cuenta ni el tamaño de tus malas decisiones, ni la gravedad de tus malas inversiones.
Se trate de dinero mal invertido, esfuerzo en vano, tiempo malgastado o cualquier otro tipo de pérdidas que hayas sufrido por haber tomado decisiones equivocadas, serás restaurado/a si lo buscas con un corazón sincero.
Dios te llama a confiar y buscar Su voluntad antes de tomar decisiones. Cuando adoptas una actitud obediente, llegará el tiempo donde no solo te restaurará lo perdido, sino que te dará también mucho más que eso.
Recuerda que tu Padre celestial es dueño del oro, la plata, la tierra y su plenitud, el mundo y todo lo que en él habita.

Mi Dios y Padre todopoderoso, hoy tomo la decisión de obedecerte y confiar en Ti en primer lugar para no equivocar mis decisiones. Sé que sabes que es lo mejor para mí, porque eres mi Hacedor y toda mi vida está en Tus manos. Declaro por fe, que restaurarás toda situación y todo lo perdido me será restituido. Recibo de tu mano mucho más que todo lo mal invertido, en el nombre de Jesús. Amén, Amén y Amén”