“Yo estoy a la puerta y llamo…” (Ap. 3:20)
Hoy te dice…
Déjate amar, abre la puerta de tu corazón y tengamos intimidad…Cuando lo
adoramos, Dios nos busca para quedarse con nosotros, tenemos que abrirle la
puerta, ya nos dio las llaves.
Él es un caballero, no obliga a nadie. La Biblia entera se trata de Dios
buscando al Hombre, desde Adán en el Edén hasta Jesús, buscando a Pedro…
Debes estar atenta/o para cuando él golpea, el único y gran secreto es
RESPONDER.
Buscar su rostro, lo que significa un nivel de intimidad más profundo.
Cenarás con Él y él contigo, habla de intimidad y correspondencia.
Él te busca, si afinas el oído, si acallas tu mente y serenas tu cuerpo
lo vas a poder escuchar.
El Espíritu Santo está buscando un lugar para anidar, quiere hacerlo en
ti, quiere hacer de tu cuerpo, de tu corazón, Su templo.
Cuando sientas la voz de Dios que te está llamando, tienes que correr,
ahora, ya, no dejarlo ara mañana.
Podría ocurrir que mañana ya no llame, ya no esté cuando yo decida abrir
mi puerta.
Busca a dios mientras pueda ser hallado.
Dios tiene diferentes estrategias para acercarse a cada uno, se vale de
diferentes cosas para tener un nuevo nivel de intimidad con vos.
¡Escucha su voz silenciosa que HOY te dice!
Déjate amar
entrégate a Mí
Te perdonaré
Te protegeré
no te dejaré
siempre viviré
¡en ti!
Mira mis ojos
entrégate a Mí
Yo te concebí
Yo te redimí
mucho Yo te amé
Mi morada haré
¡en ti!